Nuestra sociedad no entiende el porqué de nuestro sacrificio al trasmitir las ideas de nuestro jefe José Antonio. Mucha gente se limita a saltar de puntillas por su corta y penosa vida sin mostrar interés por lo que son; españoles. No valoran la etiqueta de pueblo valeroso que la historia nos ha puesto. Hoy en día la gente, en general, vive sin horizonte, no saben a dónde mirar, nada les ilumina, viven por vivir, ni siquiera Jesús existe para ellos, no tienen patria, echan por tierra todo el trabajo que antaño muchos españoles consiguieron, cruzando mares que nunca nadie había cruzado, enfrentándose a pueblos desconocidos y avanzando mirando a la muerte con alegría porque sabían que morían llevando consigo la honra de nuestro pueblo. Gracias a Dios nosotros, camaradas, sí valoramos el sacrificio de nuestro capitán y de todos los españoles que, al igual que Jesús murió en la cruz para mostrarnos el verdadero camino hacia Dios, nuestro camarada murió a manos del enemigo mostrándonos el verdadero destino de nuestra causa, que es llevar a España a lo más alto, al lugar que le corresponde por encima de todas las demás naciones. Recordemos nuestro glorioso pasado, mientras trabajamos para crear nuestro futuro, porque los verdaderos progresistas somos nosotros. Camaradas, ¡Arriba España!
Don Verdad.
Don Verdad.
